lunes, 27 de junio de 2016

I m p r e s i o n i s m o s

Deja de llover y a mí se me agotan todas las prisas con las nubes;

No sé si paradójicamente las cenizas me han desempolvado el corazón o si realmente nunca llegó a extinguirse el fuego.
Sea como sea hay algo en mí que ha vuelto a ponerse en marcha.

Y tú y yo, estáticos, supimos hacer de la noche una noche invencible.
Como las catedrales de Monet, nos volvimos policromáticos y nos olvidamos del correr de las agujas del reloj.

Quizás sea el alcohol pero no puedo ni quiero irme nunca de ti...