jueves, 5 de mayo de 2016

Planeador.

El poeta Halley ha venido planeando esta noche hasta mi cama para recordarme que el viento lo pone todo en su lugar: me ha dicho que me suelte. Que me deje. Que me olvide. Que me abandone...

Y después ha respirado como si fuese la última bocanada de aire para sus pulmones y ha vuelto a pronunciar la palabra mágica: hogar.

Y con su aliento en mi nuca he despertado de esta perfección onírica que me ha llenado los ojos de alegría.

Hasta esta noche, y hasta la próxima.

Porque cuando oscurece los poemas de bocas ajenas se vuelven un poco nuestros y nos cuentan justo eso que nos da miedo decirnos en alto...